domingo, 26 de febrero de 2012

LA UDECONCE VOLVIÓ A HACERNOS LA GRACIA


Luego de hacer abandono del sector Océano del Estadio Monumental, me preocupé de sintonizar alguna de las radios que hasta ese minuto habían transmitido el recién concluído encuentro entre Colo Colo y la Universidad de Concepción. En aquel momento de rabia, enojo e impotencia, como Colocolino me parecía oportuno e interesante conocer las declaraciones que ofrecería el técnico Ivo Basay.

Sin embargo -luego de la espera- finalmente aquello no ocurrió. Como se ha venido haciendo una costumbre tras la derrota, el entrenador prefirió no dar la cara ante los medios de prensa y con ello, la actitud del señor Basay cada día más se parece a la del argentino Diego Cagna, que ante la más mínima crítica y ante el cuestionamiento de los hinchas y periodistas, no dudaba en esconder la cabeza.

Y es que el nivel de autocrítica del actual entrenador es prácticamente nulo. Ivo Basay no solo carece de los méritos, de la preparación y de los rendimientos como para dirigir a Colo Colo, sino que además se da el lujo de hacernos creer que todo está estupendamente bien. Sin embargo olvida que él mismo se comprometió a ofrecernos -para la quinta fecha- un Colo Colo en plenitud.... plenitud que no está ni cerca de llegar.

Para el encuentro con el Campanil, el Albo tenía dos sensibles bajas: la del zaguero Pablo Contreras y la del goleador y capitán Esteban Paredes. Y lamentablemente aquello se hizo sentir. Con la ausencia de estas dos piezas fundamentales, el equipo careció de la categoría que el hincha históricamente ha presenciado en sus jugadores.

Con un Colo Colo diezmado, los once que saltaron a la cancha fueron: Prieto; Delgado, Vilches y Romo; Fuenzalida, Caroca, Toloza y Wilchez; Millar; Vidangossy y Gutiérrez.

Y en los primeros minutos el Albo llegó con peligro al pórtico de Brítez. Primero lo tuvo Fuenzalida que con remate desvió por poco. Luego una de las oportunidades más claras del encuentro fue la que desperdició Vidangossy, que inexplicablemente lanzó por sobre el travesaño. Hasta que vino un regalo de los nuestros en el minuto 22. El balón llegaba a los pies de Vilches quien se preparaba para despejar ante la presión de un delantero rival, cuando se produce la absurda descordinación entre el defensor y el portero. El error ocurre debido a que Vilches escucha el aviso de Prieto que va a salir a reventarla (de frente al balón como exige el manual), pero no sale, y en esa milésima de segundo en la que Vilches ve que el guardametas no salió y se arrepintió, el zaguero termina por perderla. El delantero rival saca centro y con tranquilidad Muñoz la manda al fondo del pórtico Colocolino... Estupidez de marca mayor entre Prieto y Vilches.

Con el gol en contra vino toda la desesperación de un Colo Colo que evidencia escaso -por no decir nulo- trabajo táctico. Y es que son justamente estos momentos de adversidad, donde queda de manifiesto que no hay una idea futbolística que rescatar. Simplemente el equipo juega a lo que salga, a la improvisación de los jugadores y a la esperanza de que en un momento de iluminación, alguno de los futbolistas aproveche "la oportunidad".

Sin embargo, y para mala fortuna de todos nosotros, esas oportunidades tampoco fueron aprovechadas por los jugadores del Popular. Lucas Wilchez de -irregular cometido- a los 30 minutos tuvo el empate, pero el argentino envió el balón directamente a la tribuna Magallanes, lo que constituye otra inexplicable oportunidad desperdiciada por los nuestros. Y en portería propia, cuando la primera fracción vivía sus últimos pasajes, la U de Conce tuvo el segundo gol, pero gracias a un oportuno cruce de Bruno Romo, éste termina "comiéndose" un pelotazo que de milagro no se coló en el palo izquierdo de un ya vencido Francisco Prieto.

Con más de 20 mil asistentes, la necesidad de revertir el pésimo primer tiempo era el desafío que el entrenador debía exigirles a sus dirigidos. Y respondiendo a esa intención es que Basay dispuso de dos sustituciones que en el papel debían ser una mejora al rendimiento de la primera fracción: Fierro por un deslucido Fuenzalida y González por un bajísimo Toloza fueron los movimientos provenientes de la cabina técnica.

Sin embargo, la parcialidad Alba no se terminaba de acomodar en sus asientos, cuando vino otro balde de agua fría. En el minuto 52 el equipo de V. H. Castañeda se colocaba 2 a 0, aprovechando las licencias de una defensa Alba que durante todo el desarrollo del encuentro se vio timorata, imprecisa y sobrepasada.

Si ya las cosas estaban complicadas, con el segundo gol de Muñoz todo fue peor. El descontento y la desaprobación del hincha quedaban de manifiesto en cada mal pase o en cada mala decisión de un jugador Colocolino. Las silbanitas, la puteadas y las patadas a las butacas fueron la tónica en la segunda etapa y los jugadores lo sintieron.

Desde la banca Basay decidió apostar por una tercera sustitución y así mandó a la cancha a Olivi en reemplazo de Vidangossy. Y con un rival jugando a defender el favorable marcador y sin un Colo Colo ordenado, es que por largos minutos la tarea del equipo de Concepción parecía cómoda.

A partir de ese momento Colo Colo se posicionó en campo rival y -con cierta sorpresa- apareció a ratos uno que hasta ahí había sido normalmente criticado. Hablo de Miguel Ángel González quien tomó el balón, tuvo un tiro libre que dio en el poste y al menos buscó ser aporte al trabajo del Albo.

Oportunidades para descontar existieron como el cabezazo de Vilches, pero el palo dijo que no. Luego Millar lo intentó con un remate que se perdió por el costado. Corrían y corrían los minutos y la inseguridad en el desempeño de los jugadores era evidente. Pero como el fútbol da revanchas y éstas hay que saberlas aprovechar, el argentino Mauro Olivi buscó el espacio para probar al arco y en el minuto 67 por fin vino una esperanza para el Popular, mediante un estupendo zurdazo del Pampa que se clavó en el pórtico de Brìtez.

Con el descuento la afición se entusiasmó por el empate. Sin embargo la realidad de nuestro Colo Colo no está para imitar aquellas jornadas en que se podía revertir resultados. El Colo Colo de Basay no supo ni pudo encontrar la fórmula y solo mediante "ponchazos a la que te criaste", se trató de conseguir una ahnelada paridad.

El cronómetro avanzaba y vino una doble tarjeta amarilla y la expulsión de Diego Diaz en el Campanil, pero el hombre demás tampoco sirvió para desequilibrar. Y cuando el partido expiraba, vino otra jugada de Wilchez que nuevamente se fue al travesaño y lamentablemente el rebote no pudo ser capitalizado por Gonzalo Fierro.

Fin del encuentro. Enojo, decepción y abucheo generalizado de una parcialidad agotada del pobre trabajo futbolístico y de la incapacidad de revertir momentos adversos. Así como la nula capacidad del cuerpo técnico, que simplemente juega a lo que salga y de jugadores que caen en errores no aceptables para la exigencia que impone pertenecer a Colo Colo.

Con esta paupérrima presentación el equipo de Basay sigue con las mismas dudas e interrogantes del semestre pasado. Y las fechas pasan y pasan... Interrogantes que ni el Director Técnico de Colo Colo es capaz de responder, porque sencillamente prefiere no dar la cara.

8 comentarios:

  1. Pensar que a Cagna y Gallego los echaron por menos, pero también la cosa va por la falta de jerarquía de muchos jugadores del plantel... ya no sé que pensar...

    Aguante el Albo, que saldremos de esta!

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  2. Gengar99
    La jerarquía de muchos es indiscutible, pero tb es cierto que hay otros que teniendo el nivel, se terminan viendo mal a consecuencia de la improvisación inexplicable que existe en el juego de Colo Colo.

    El amor y la pasión por el equipo nos obliga a creer en un repunte, pero la realidad nos lleva a ser objetivos... tampoco se que pensar.

    saludos.

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  3. Ni Guardiola puede arreglar esto, a este equipo le falta jerarquia estos jugadores en la decada de los 80 o 90 no jugaban en el albo, y lo malo que Basay no sabe para donde va la micro.

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    1. Joseral
      Yo creo que se ganó bastante jerarquía con la llegada de Contreras y el retorno de Fierro. El primer por sobre todos, sin embargo hay dos cosas que decir.

      1. que la jerarquía no sirve de mucho cuando hay una idea de juego. Queda claro que el bajo nivel y no sería extraño que en futuro hasta Pablo se vea mal.

      2. que el equipo lo armó Basay... esto es super importante. Él mismo reconoció y asumió que el plantel está hecho a su pinta... luego acusar lo contrario es justificar lo injustificable.

      saludos.

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  4. LA PACIENCIA SE ESTA AGOTANDO ENTRE LOS HINCHAS....EL PLAZO PARA EL DT SE CUMPLE!!!... OJALA HAYAM BUENOS RESULTADOS...PERO EL 5 DE ABRIL RECIEN SON ELECCIONES PARA PODER VER SI EL CAMBIO EN TODO COLO COLO ES POSITIVO!... NADIE SABVE Q' PENSAR...Y COMO LO DIJE PACIENCIA YA NO HAY!!!!................... BASTA!!!!!!!!!!!

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    1. ROSE MARIE
      La paciencia se agota entre los hinchas. Se nota en el ambiente del estadio y en cualquier local donde hayan hinchas viendo al Popular.

      Es que son muchos años de discursos incumplidos.
      Soy de la idea de que Basay debe terminar su torneo sí o sí, no quiero cambios a mitad de campeonato, pero creo que ya tenemos claro que la cosa no va por buen camino.

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  5. Estimado como siempre acertada columna, da rabia ver como en nuestra casa nos ganan otra vez y por errores de ekipos de segunda categoria, no hay una idea clara y las ausencia se siguen notando demasiado...

    Concuerdo con que Basay debe terminar el campeonato como sea, y que ojala se pueda revertir esta situacion, lo que rescato del partido fue que MAG fue un aporte y Olivi pudo marcar un golazo para que gabne confianza.

    ojala sigamos avazando en el juego y no avazemos dos pasos y retrocedamos 4

    saludos y un abrazo

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  6. Sin ver el partido y leyendo lo que pones, me imagino como debió ser, Colo-Colo tiene muy buenos jugadores, pero lamentablemente creo que no lo podrán demostrar como corresponde mientras la dirección técnica siga confundida y nerviosa, es lamentable y la paciencia ya no existe en el hincha albo, pero hay que terminar este proceso como corresponde (se fracase o no) para no cometer los errores del pasado cambiando dt's como quien se cambia de ropa. El hincha debe armarse de paciencia sobre todo en el estadio y apoyar con el alma, para k cuerpo técnico y jugadores sientan un real apoyo y puedan soltarse y quitarse ese nerviosismo que creo es una de las causales del por que el equipo no muestra su real potencial. Saludos maestro siga con las grandes columnas.


    @PabloReyes_F

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